Después del examen MIR… ¿Y ahora qué?
El MIR es un viaje que va más allá del examen: se sitúa antes, durante los duros momentos de estudio, y también después, cuando llega la ansiada "calma".
Se trata de una etapa en la que también son necesarios momentos de desconexión, precisamente por la complejidad, duración y dureza del proceso. Debido a todo esto, es normal que después del examen, surjan muchas emociones. Emociones a las que conveniente darles espacio.
Quizás, tras haber realizado el examen, surge alivio sensación de paz, desahogo o libertad… pero también inquietud, nerviosismo, dudas o preocupación, entre otras. Estas emociones pueden convivir en forma de contradicciones en cada uno/a de nosotros/as, y es totalmente normal.
Sea lo que sea que estés sintiendo ahora mismo, lo mejor que puedes hacer es darte un break e intentar alejarte un poco del mundillo MIR. Básicamente, por dos razones: te lo mereces y lo necesitas.
Aunque cada persona tendrá sus preferencias y sus necesidades, en este artículo te traemos algunos consejos para que afrontes esta semana de desconexión POST-MIR de la mejor manera posible, que es cuidándote, desconectando y disfrutando de las merecidas vacaciones.
1. Relájate
Lo primero que te recomendamos es que aproveches estos días en los que no debes estudiar para relajarte. Sí, seguramente no hayas conseguido hacerlo durante todo este camino pero, por suerte, después de la tormenta llega la calma.
¿Cómo puedes relajarte? A través de diferentes ejercicios o actividades. Aquí te proponemos dos:
Meditación
La meditación es una herramienta muy beneficiosa para la salud mental y para la salud física. No hace falta que seas experto/a en la materia para poder meditar; en internet, por ejemplo, encontrarás muchos tips para iniciarte en esta práctica milenaria.
Eso sí, deberás buscar un espacio tranquilo, silencioso y donde te sientas cómodo/a. Puedes empezar por diez minutos al día y poco a poco aumentar el tiempo.
Yoga
La práctica del yoga también resulta muy beneficiosa para la salud en muchos sentidos. Tampoco hace falta que seas experto/a, puedes acudir a tu gimnasio, a alguna asociación, hacerlo solo/a en casa a través de tutoriales… Lo importante es poner en marcha el cuerpo y desconectar.
2. Haz deporte
Seguramente, en pleno período MIR, no tenías mucho tiempo para practicar deporteo, si lo practicabas, es probable que no estuvieras al 100%, al tener media cabeza en el examen. Pero, ¡estás de suerte! Ahora que ya lo has hecho es el momento ideal para volvera ese gym en el que tanto te echan de menos. Si quieres una opción más económica, puedes optar sencillamente por salir a pasear o a correr por el parque.
3. Haz una escapada
También es un momento ideal para hacer aquella escapadita a la montaña, o a la costa… Lo importante es cambiar de aires y renovar energías.
Puedes hacerlo solo/a o en compañía (si puede ser, con la compañía de alguien que no te recuerde constantemente qué preguntas fallaste). Un consejo extra: ¡Desconecta el móvil!
4. Practica tu hobby
Lee, escribe, baila, pinta acuarelas… Da igual lo que hagas, lo que importa es que ahora dispones de tiempo extra para poner en práctica aquel hobby que tan abandonado tienes. Así que, actívate y busca aquella pasión olvidada que tanto te apetecía volver a alimentar.
7. Prémiate
Puedes sentirte orgulloso/a, no todos/as tienen la valentía de presentarse a un examen de estas características.
Así que, ¿por qué no te auto refuerzas un poco? Siéntete orgulloso/a y satisfecho/a por el trabajo, y permítete disfrutar con algún capricho que te des, del tipo que sea.
6. No pienses en el examen
Otro consejo que nos gustaría darte, y que puede resultar obvio (aunque no es tan fácil de conseguir), es el siguiente: no pienses en el examen. Ya pasó, está hecho. Las respuestas no van a cambiar e hiciste la única versión que podías haber hecho: la tuya.
Pensar en él solo te traerá dolores de cabeza e inquietudes innecesarias; te mereces desconectar un poco después de tanta carga, ¿no crees?
7. Cuídate
No te olvides de lo más importante: cuidarse. Así que opta por comer de forma saludable, a través de una dieta equilibrada y sin exceso de azúcares y grasas. Aunque ahora posiblemente tengas el día mucho menos estructurado, intenta mantener una mínima rutina.
Haz las cinco comidas diarias correspondientes y a la misma hora aproximada, practica algún deporte o sal a caminar (evita el sedentarismo), no tomes alcohol y tabaco en exceso, aprende a escuchar lo que necesites en cada momento, etc.
Vienes de una etapa dura física y mentalmente, así que es hora de reponer fuerzas y de buscar otra vez ese equilibrio interior.
8. Busca momentos para ti
Aunque con los tips anteriores nos estamos refiriendo, en parte, a lo mismo, el siguiente consejo habla de esto: de dedicarte tiempo. Buscar momentos para simplemente estar solo/a, para escuchar música, para salir de casa a airease y pasear sin rumbo… y después, lo más importante, disfrútalos.
9. Rodéate de personas con buen feeling
Finalmente, te recomendamos que te rodees de personas con las que tengas buen feeling, personas que emitan energía positiva y buenrollismo.
Aléjate de personas excesivamente negativas, que estén hablando continuamente del MIR o, simplemente, personas "tóxicas". Piensa que nos alimentamos también de la energía de los demás; tu mente y tu cuerpo te lo agradecerán.
Copyright de la foto: Portada - Keegan Houser (Unsplash), Relajate - Yannick Läderach (Unsplash), Prémiate - freestocks.org (Unsplash), Cuidate - Nadine Primeau (Unsplash), Personas con Buen Feeling - Sammie Vasquez (Unsplash)